lunes, 3 de febrero de 2014

La vida del jilguero

Jilgueros
Los jilgueros se caracterizan por tener un canto melodioso que, a veces, es capaz de combinar en una serie armónica notas agudas y graves. El canto de estos pájaros constituye un motivo especial de atracción, junto con el colorido intenso de su plumaje, que en algunas especies resultan muy llamativo. Por estas cualidades, y porque toleran la vida en cautiverio, muchas personas prefieren, habitualmente, verlos vivir dentro de jaulas, los que no dejarán de cantar a pesar del encierro.

Numerosas especies
Los jilgueros son un grupo de la gran familia de los emberícidos, constituidos por una gran cantidad de especies, que pueden diferenciarse entre sí por la coloración, por detalles de la anatomía o por el tipo de canto. Varias especies de jilgueros pueden hallarse en el territorio argentino. El que más comúnmente encontramos es el jilguero amarillo (sicalis flaveola), cuya coloración varía según se trate de un macho o una hembra. Aquel presenta colores vivos, mientras la segunda tiene una tonalidad entre parda y grisácea. El jilguero lino (sicalis auriventris) es de mayor tamaño que el resto de las especies. El misto (sicalis luteola) vive en altos pastizales, y se distingue por su canto nasal y poco musical, y sus densas bandadas invernales.

Un canto muy dulce
El canto de los jilgueros se distingue por poseer una musicalidad poco frecuente. Lo que en otras aves son gritos o sonidos aislados. No siempre un canto o un trino en estos pájaros se constituye en una secuencia armónica de notas musicales. Para emitir estos cantos tan admirados se valen de un aparato vocal o siringe, cuyos músculos pueden realizar determinados movimientos y producir así, variaciones de sonidos al paso del aire. El canto del jilguero común se compone de gorjeos animados y dulces, cantan en vuelo. Los sonidos que emite el jilguero tienen un ordenamiento característico. Comienza con un preludio, constituido por una serie rápida de trinos y chillidos: son notas agudas, breves y penetrantes. Esta seguidilla se continúa, por lo general, por una nota larga y más grave, o bien, por una secuencia de seis notas, siempre en un tono más bajo. En primavera y en verano, que es la época de la reproducción, el jilguero macho canta con mayor energía, aunque tanta efusividad disminuye sus cualidades melódicas.

La preferencia por la semilla
Los jilgueros prefieren las semillas para alimentarse. El mismo hábito caracteriza a todos los emberícidos, razón por la cual los miembros de la familia también se conocen con el nombre de "semilleros". En los representantes de este grupo, la anatomía está adaptada por ayudarlos a ingerir el grano. Poseen un pico de bordes cortantes con el cual lo parten y descascaran, ayudándose para la ingestión con la mandíbula inferior, capaz de producir un pronunciado movimiento de adelante hacia atrás. Los insectos completan la dieta de estos pájaros en la edad adulta. Pero los pichones de algunas especies son alimentados casi exclusivamente con insectos. Algunos de estos pájaros alimentan a su cría por regurgitación (pasaje de alimento directo de buche a buche); los más insectívoros llevan las presas en la punta del pico. El jilguero es menos insectívoro, pero la cantidad de insectos que consume aumenta en proporción durante la primavera y el verano. En esta época, en la región chaqueña, los insectos pueden llegar a constituir el 22 por ciento de su dieta.

El nido del hornero es mejor
Al llegar la primavera, la pareja del jilguero comienza a merodear el nido otros pájaros. Prefiere el hornito de los horneros, pero también el sólido albergue de los leñateros, hechos con palitos relativamente gruesos, así como huecos diversos donde albergarán a la prole. Ya llega la época en que la hembra pondrá los huevos y buscan el mejor nido para sus pichones. La dificultad se presenta cuando esos nidos que codician están ocupados por los dueños de casa; entonces comienzan las disputas. Con increíble perseverancia, los jilgueros acosan a los habitantes del nido. Se instalan en una rama vecina para poder vigilar constantemente, y al menor descuido intenta tomar posesión. A medida que se acerca la postura, los jilgueros se vuelven más osados y en ausencia de los horneros se asoman al nido y a veces entran. Los horneros aparecen para echarlos, con gritos de furia, pero apenas se alejan se reitera la acción. Aún encontrando huevos o pichones en el nido ajeno, los jilgueros, particularmente el macho, comienzan a trasladar plumas y pajas para armar el de ellos. Mientras se abocan a esta tarea, suele aparecer la golondrina, sobre todo si se trata de un nido de hornero, y el jilguero disputa con ella la vivienda que ninguno de los dos ha construido. Cuando la golondrina consigue echarlo el jilguero dejar pasar unos minutos y vuelve a la embestida, pero en el enfrentamiento con la golondrina, así como con el hornero, lleva las de perder. En general consigue sus sitios de nido más por perseverancia que por fuerza. Anteriormente en jilguero nidificaba en casas de pueblos y ciudades, de donde ha sido desalojado por el introducido gorrión (passer domesticus). Los jilgueros macho, además, se pelean frecuentemente entre sí por los sitios de nido. Durante estas peleas baten frenéticamente las alas enfrentándose uno a otro. Esta conducta, o una muy similar se aprecia también durante el cortejo, acompañada de canto. El jilguero construye el nido con pajitas y otras fibras vegetales, utilizando para acolcharlo crines y plumas. Éste último trabajo está a cargo de la hembra. El nido tiene forma de taza.

El canto acorta la espera
Una vez que la pareja de jilgueros resolvió el problema del albergue, la hembra pone de tres a cinco huevos, usualmente cuatro. En nuestra zona, la postura tiene lugar entre octubre y marzo. Los huevos son de forma alargada y la cáscara es gris celeste en un tono pálido, con manchas de color rojo amarronado. La hembra es la encargada de incubarlos. Durante la incubación, que dura entre 13 y 14 días, el jilguero macho suele ser el encargado de buscar el alimento y llevárselo a la hembra al nido y, a veces, ocupa la rama de un árbol próximo desde donde emite sus gorjeos. Los pichones son alimentados por ambos progenitores, mediante regurgitación. En la época invernal, los jilgueros abandonan la vida en pareja y viven en bandadas pero no son aves migratorias.
El jilguero es una de las especies de aves, así como los cardenales, que sufren los embates de una elevada captura con fines comerciales.

Nombre
VulgarJilguero, Jilguero común, Jilguero amarillo
CientíficoSicalis flaveola
Ubicación taxonómica
Clase: Aves
Subclase: Neornithes
Supesrorden: Neognathae
Orden: Passeriformes
Suborden: Passeres
Familia: Emberizidae
Género: Sicalis
Especies: Sicalis flaveola
Descripción
ColoraciónEl jilguero común presenta una tonalidad diferente según se trate de un ejemplar macho o hembra. La cabeza del macho adulto es amarillo verdosa y adquiere en la frente un tono levemente anaranjado. La zona dorsal es verdosa con rayas negras a lo largo, y el vientre es amarillo. Las alas y la cola son negras con rebordes amarillentos. La hembra presenta tonos más apagados. El dorso es gris parduzco jaspeado de negro. La zona ventral es blanco grisácea, con rayas marrón oscuro en el pecho y en los flancos. El macho joven es similar
Rasgos Morfológicos más salientesAves canoras que presentan un aparato vocal o siringe cuyos músculos están adaptados para realizar una serie de movimientos de los que dependen las variaciones de sonidos que producen. El pico varía su forma de una especie a otra, pero es, en general, corto, cónico y macizo. La mandíbula inferior produce un movimiento de oscilación de adelante hacia atrás que lo ayuda en la ingestión de alimentos. Las alas, estrechas y puntiagudas, presentan nueve primarias bien desarrolladas; la décima falta y está reducida. Las patas poseen cuatro dedos dispuestos todos en el mismo nivel, tres hacia delante y uno hacia atrás; no están unidos por membrana y se hallan adaptados para permitirles pararse en las ramas de los árboles, tallos de pastos, etc.
DimensionesAproximadasPeso: 14 gr.Longitud del cuerpo: entre 11 y 16 cm.



DIFERENCIAS ENTRE MACHO Y HEMBRA
Coloración general: La coloración general en los machos tiene una tonalidad mas brillante y mas vivaz, con notorio amarillo en las alas. En el caso de las hembras la coloración es mas opaca y menos llamativa, y la cantidad de amarillo esta mas reducido. Esto es así debido a que el macho debe captar la atención de la hembra, y esta, debe pasar lo mas desapercibida posible mientras tiene estancia en el nido.
Careta: La careta o madroño rojo, en el caso de los machos es mas grande, llegando a sobrepasar el ojo por encima del parpado. En el caso de las hembras la careta no sobrepasa el ojo, sino, se queda a mitad del parpado, o a 3/4 como mucho. La zona blanca de la cara es más clara en el macho que en la hembra.
Bigotes: Es la zona que rodea el pico Los bigotes se encuentran en los laterales del pico. En el caso de los machos, estos son de color negro. En el caso de las hembras son de color grisáceo.
Capirote: Es la zona que va desde la cabeza hasta el principio de la espalda, es negra en el macho y pardo grisácea en la hembra.
Arriba: jilguero macho. La careta de color rojo sobrepasa el ojo.
Arriba jilguero hembra, la careta no sobrepasa el ojo.
Hombros: Para observar correctamente los hombros hay que estirar suavemente del ala del ejemplar. En el caso de los machos los hombros son completamente negros. En el caso de las hembras los hombros son pardo grisáceos salpicados de verde. En algunos casos hay machos con hombros verdes, estos son conocidos como "machos empedrados" o "machos aliverdes". En la foto inferior, el macho a la izquierda con su hombro negro, la hembra a la derecha con su hombro pardo.
Habas: Las habas son círculos (no esféricamente perfectos) blancos, situados en las plumas de la cola (no confundir con las pequeñas pintitas blancas que hay en la punta de las plumas de la cola). Las habas se dividen en números pares que van del 2 al 8, su función es básicamente estética y los machos las emplean para llamar la atención de las hembras cuando abren la cola durante su danza nupcial. Por esta razón es mas común que los machos posean mayor numero de habas, mientras que las hembras raras veces sobrepasan el numero de 4 habas.
Además de las habas, el plumaje del jilguero macho en la parte final del vientre, acaba en un único vértice, mientras que en la hembra acaba en dos vértices. En estas fotos a la izquierda un macho de 4 habas, a la derecha una hembra.

2 comentarios:

  1. ¡que hermosos que son! siempre le pido a Dios que si estoy en el

    paraíso me permita cuidar a las aves, me encantan!

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  2. ¡que hermosos que son! siempre le pido a Dios que si estoy en el

    paraíso me permita cuidar a las aves, me encantan!

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